

¿Y si te pasas a la metodología ágil para desarrollar tus proyectos? Te contamos todo sobre este enfoque que te permite gestionar tus proyectos eficazmente.
El medio de comunicación que reinventa la empresa
Entre los principales desafíos para la planificación de un proyecto se encuentra la producción regular de un CMI o cuadro de mandos integral (scoreboard). Este enfoque formaliza un resumen rápido del rendimiento de un proyecto o de una empresa que luego puede usarse para corregir eficazmente cualquier irregularidad.
¡Descubre todas las ventajas de esta herramienta, la importancia de elegir los indicadores correctos, cómo construir un CMI o cuadro de mando integral con éxito y por qué hacerlo con un software especializado!
El cuadro de mando integral ayuda a visualizar los elementos claves de un proyecto o de una empresa y a gestionar de manera proactiva su progreso.
El CMI es una herramienta que se usa tanto para la comunicación interna como externa.
El propósito es organizar y dirigir el despliegue de la estrategia a través de un enfoque basado en herramientas analíticas.
Traducir objetivos estratégicos en objetivos operativos,
Priorizar proyectos de desarrollo y acciones de marketing,
Medir y monitorear la trayectoria de la empresa hacia el logro de los objetivos definidos,
Alinear el trabajo de cada empleado con los objetivos operativos,
Facilitar la comunicación para todos los departamentos.
Un indicador es un dato capaz de resumir información mucho más compleja en un solo número o tendencia, los indicadores constituyen la base de cualquier CMI.
Al gestionar varios proyectos, es aconsejable combinar KPI (key performance indicator) o indicadores operativos para los procesos internos y de rendimiento para una perspectiva financiera, favoreciendo un enfoque inteligente.
Este tipo de indicador se centra en la eficiencia de la "gestión de proyectos" al medir esencialmente los esfuerzos realizados en relación con los objetivos iniciales.
Las preguntas de evaluación a las que responde siguen siendo bastante simples: se relacionan con los problemas de QCD (calidad, costos, tiempo) de la organización, y el resultado a menudo se expresa como un porcentaje o en valor monetario. Los más comunes son:
¿Cuál es el nivel actual de uso de los recursos planificados?
¿Cuáles son los tiempos promedio dedicados a ciertas tareas?
La gestión del proyecto también implica el control y el monitoreo de los riesgos relacionados con el proyecto o tipo de actividad.
Debido a esta perspectiva específica de gestión del tiempo y posibles retrasos, generalmente se expresan en forma de tasa de disponibilidad (cálculo provisional de la carga de trabajo, evaluación del absentismo, etc.) o logro (número de tareas completadas en relación con el total planificado, etc.).
Verdaderas alertas en la detección de anomalías, su rápida corrección evitará el deterioro de uno o más indicadores de resultados en un horizonte más largo.
Con frecuencia, los indicadores se asocian con los códigos de color verde (OK), amarillo (atención) o rojo (situación crítica) cuando intentamos representarlos gráficamente.
En este perspectiva entran todos los datos que pueden medir la relación de cliente con respecto a tu producto o servicio.
Por ejemplo:
fidelidad del cliente,
precio del producto o servicio,
imagen que tienen los clientes,
nuevos clientes potenciales,
notoriedad, etc.
Suele ser uno de los indicadores tradicionalmente utilizados para medir el rendimiento de las empresas. El seguimiento del plan estratégico suele verse reflejado en este indicador, básicamente son todos los datos que reflejan la situación económica de la empresa.
Se trata de medir los activos que permiten a la empresa desarrollarse y evolucionar. La perspectiva de aprendizaje y crecimiento se convierte en un indicador de los recursos humanos: implicación, motivación, cultura de empresa, competencias, satisfacción y productividad.
La correcta lectura e interpretación de estos indicadores permite una toma de decisiones bajo una lógica de largo, mediano y corto plazo.
A pesar de una aparente simplicidad, la configuración de un cuadro de mando no puede ser improvisada. Existen requisitos obligatorios para hacer que este enfoque sea coherente con el negocio y la organización de la empresa.
De acuerdo con Robert S. Kaplan y David P. Norton, un Balanced Scorecard, es un cuadro de mando estratégico cuyo objetivo es tomar en cuenta todas las dimensiones que afectan el desempeño de las medidas financieras y operativas en una empresa.
El BSC o cuadro de mando integral es un sistema de gestión integrado en la estrategia.
Estas son las 4 perspectivas del modelo:
Cliente.
Finanzas.
Proceso interno.
Aprendizaje y desarrollo.
El diseño de una estrategia requiere la definición precisa de los resultados esperados. Debes asegurarte de haber identificado adecuadamente las necesidades de la empresa y haber de fijado objetivos realistas.
©Wikipedia
Para ello, debes construir un mapa estratégico que contenga:
Finanzas,
Cliente,
Proceso de negocios interno,
Aprendizaje y desarrollo.
Debes relacionar los objetivos entre ellos, en una relación de tipo causa-efecto.
Debes elegir únicamente los indicadores pertinentes según la estrategia y los objetivos.
Por lo tanto, no retengas más de una docena de indicadores, evita la recopilación de datos complejos y que requieren mucho tiempo de análisis.
Se trata de elegir las acciones concretas que deben ser llevadas a cabo para lograr los objetivos.
Puedes seguir este modelo para construir tu cuadro de mando personalizado.
Objetivos | Indicadores | Objetivos | Iniciativas | |
Perspectiva financiera | ||||
Perspectiva del cliente | ||||
Perspectiva de Procesos internos | ||||
Perspectiva de aprendizaje y desarrollo |
En el siguiente video, descubrirás un video que explica detalladamente cómo crear un CMI en Excel.
El CMI o cuadro de mando integral de IsoTools permite la creación de tableros personalizados según el público objetivo o los diferentes niveles de la organización.
La herramienta ayuda a integrar las diferentes etapas de la construcción de una estrategia a través de una gestión sencilla y visual del cuadro de mando.
La construcción de la misión, visión y valores de la empresa.
La definición de objetivos estratégicos bajo una relaciones de causa-efecto.
Kawak hace que la medición de tus procesos sea simple y eficiente.
Kawak es un software de gestión de proyectos en línea que permite centralizar todos los indicadores de tu empresa en un solo sitio. La alimentación de datos puede ser realizada mediante archivos planos CSV o partir de otros sistemas de información.
El diseño y seguimiento de diferentes indicadores a partir de variables y fórmulas.
La posibilidad de agrupar indicadores por familias y obtener resultados consolidados.
Se trata de una herramienta proactiva de dirección y monitoreo, un activo esencial durante la gestión del proyecto.
Optimiza tu estrategia a tiempo gracias a información fiable disponible en tiempo real, una máxima visibilidad del avance de tus objetivos y los recursos disponibles.
Artículo público en marzo 2019, actualizado en octobre 2020