Precontrato de trabajo: paso a paso… ¡Y al alcance de un clic!

La Dirección ha establecido una serie de necesidades en términos de contratación para la empresa y tú debes asegurar los procesos de selección.

Satisfecho(a) de ver que has atraído a los mejores perfiles gracias a una campaña eficaz, ahora tienes que asegurarte de no perderlos en el camino, antes de lograr firmar con ellos el contrato.

¿Cómo haces para asegurarle a Amy, experta estadounidense en Big Data, o a Manolo, growth hacker que trabaja para una importante compañía en España, que la promesa del nuevo puesto se cumplirá? Recurriendo al precontrato de trabajo.

Aún cuando su redacción no entraña ningún misterio, este documento legal debe considerar la inclusión de cierta información básica. Para que la gestión administrativa del talento humano no te haga zancadilla, resumimos la información fundamental que necesitas conocer: qué obligación tiene cada una de las partes, qué hacer en caso de perfil extranjero, incumplimiento, etc.

El precontrato de trabajo es un documento legal que representa un acuerdo entre una empresa y un(a) profesional, respecto a la prestación de un servicio y su remuneración consecuente.

Dicho documento:

• Es redactado por el empresario.
• Se firma para asegurar a las partes que los compromisos establecidos durante la fase de negociación se cumplirán.
• Tiene como objetivo garantizar:
  • A el/la futuro(a) trabajador(a): que tendrá un contrato de trabajo en la compañía (ya sea parcial o indefinido);
  • a la empresa: que la persona se va a vincular efectivamente a la plantilla.

Aún cuando no constituye el contrato de trabajo final entre las partes, no da derecho a percibir un salario, no contribuye a acumular antigüedad en la empresa, el precontrato de trabajo tiene plena validez jurídica.

De ahí la importancia de incluir la información mínima necesaria que garantice el cumplimiento de las obligaciones laborales pactadas como:

• Cuál es el cargo o puesto ofrecido,
• cuál es la fecha de inicio de la relación laboral.

Cuando el precontrato de trabajo no menciona claramente:

• El cargo,
• la fecha de inicio de las misiones,
• la duración del contrato,
• la remuneración,

este representa una mera oferta de trabajo. Veremos en detalle más adelante en qué se diferencian estos dos documentos.

Puesto que el precontrato de trabajo es un documento con validez legal, el mismo debe ser redactado con el máximo cuidado. Este debe contener un mínimo de información básica y acogerse a las menciones legales obligatorias que apliquen.

💡 Importante: Si el precontrato está mal redactado o sus términos no proporcionan la suficiente claridad, este no podrá utilizarse como prueba ante los tribunales en caso de litigio.

La información que es aconsejable incluir en su precontrato de trabajo es la siguiente:

• El nombre y los apellidos de la persona trabajadora;
• la denominación exacta del puesto que va a ocupar;
• los horarios de trabajo (incluidas las horas extraordinarias);
• el importe de la remuneración o salario a percibir;
• la fecha de inicio y el tipo de contrato (a término definido o indefinido);
• los beneficios a los que tendrá acceso la persona que será contratada.

Es imprescindible que el precontrato de trabajo:

• Se redacte en dos ejemplares:
  • Uno para el empresario,
  • uno para el/la trabajador(a).
• Lleve las firmas de ambas partes para que quede formalizado.
• Se archive en un lugar seguro para poder utilizarlo en caso de litigio.

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Utiliza el anterior formato a manera de ejemplo y sustituye la información que corresponda a tu empresa y a la persona con la quien deseas celebrarlo.

Un software de recursos humanos que se encargue del procesamiento integral de las actividades del departamento como es el caso de un SIRH, cuenta con funcionalidades de firma electrónica y gestión documental que simplifican la firma de contratos.

Además de ahorrar tiempo valioso en la preparación del documento, te aseguras que las comunicaciones sean efectivas y de cumplir con las obligaciones legales.

Una oferta de trabajo realizada por un empresario a un profesional constituye una promesa unilateral de empleo.

Esta oferta de trabajo, realizada por el empresario, no conlleva una obligación de aceptación ni por parte de la persona que solicita el empleo, ni por el empresario.

En otras palabras, la oferta de trabajo no constituye un contrato de trabajo per se: legalmente, en caso de que el empresario se retracte, esto no lo obliga a celebrar un contrato de trabajo.

En cuanto al contrato de inicio diferido, este consiste en un acuerdo de voluntades entre la empresa y el/la trabajador(a) para llevar a cabo la vinculación laboral de este último en un futuro próximo.

Dicho contrato se firma antes que la relación laboral se haga efectiva, pero a diferencia del precontrato, este sí conlleva los efectos legales que cualquier otro tipo de contrato. Es decir que su ruptura constituiría un despido y no un simple fin al acuerdo entre las partes.

Un precontrato de trabajo no es obligatorio antes de firmar un contrato laboral con alguna persona y el procedimiento para llevar a cabo su firma no siempre es el mismo. Sin embargo, constituye una medida para garantizar que los términos que han sido negociados se mantengan.

Existen algunas situaciones en las que es común recurrir a este tipo de documento.

Su firma responde al hecho de querer asegurar un marco de confianza para el/la profesional(a) ante el eventual proceso de movilidad laboral que tendrá que afrontar. Asimismo, de proporcionar el tiempo necesario para regularizar su situación administrativa y legal en el nuevo país (que sea con el patrocinio o no de la empresa).

Con la generalización de las políticas de trabajo remoto en muchas empresas, este tipo de documento se ha convertido en un trámite bastante común para el departamento de recursos humanos. Este no solo ofrece la posibilidad de derrumbar las barreras geográficas que separan al mejor talento humano de las mejores empresas, sino que permite a estas últimas expandirse más fácilmente y ofrecer mejores oportunidades y condiciones de trabajo a las y los candidatos.

A pesar de los muchos esfuerzos que se han hecho por regularizar ciertos tipos de trabajo, algunas actividades siguen teniendo vacíos a la hora de proporcionar un marco de contratación claro. Las personas que por lo general prestan servicios a domicilio, suelen también recurrir al precontrato de trabajo. En este caso, el mismo sirve como garantía de un acuerdo que ha sido pactado generalmente de forma oral y para trabajar para una nueva persona o familia.

Si, dentro del plazo definido en el precontrato o, en su defecto, dentro de un plazo razonable, el empresario manifiesta su voluntad de no seguir vinculado a él, la ley considera que no ha cumplido su palabra. Por lo tanto, debe responder por los perjuicios causados a el/la beneficiario(a) de la oferta.

💡 Si, al redactar la oferta, el empresario menciona la posibilidad de retirarse bajo determinadas condiciones (si el trabajador no se presenta en un plazo determinado, por ejemplo), legalmente no está obligado a pagar ninguna indemnización.

👉 Por último, si el futuro trabajador demuestra por medios legales que el desistimiento del empresario le ha causado un perjuicio, éste debe pagar una indemnización por daños y perjuicios.

En principio, el empresario que hace una promesa unilateral de contrato de trabajo no puede retractarse de él. En caso de retractarse, su decisión se considerará un despido y tendrá que dar una razón legítima para romper su promesa de empleo.

Si no se puede alegar ninguna razón válida, el empresario tendrá que pagar determinados costes en función del tipo de contrato prometido.

Tanto si se trata de una promesa unilateral de contrato de trabajo como de una oferta de contrato de trabajo, si el trabajador no respeta sus obligaciones y responsabilidades (plazos, horarios, etc.), puede ser condenado a pagar una indemnización por preaviso a su empleador.

También debe pagar una indemnización por daños y perjuicios según la decisión n° 91-44288 de 29 de marzo de 1995.

• El precontrato de trabajo es un documento legal que se firma entre dos partes y que funciona a manera de una futura vinculación laboral.
• El cumplimiento de los requisitos y formalidades legales (tanto para el empresario como para el trabajador) es esencial dentro del marco de la celebración de un precontrato de trabajo.
• Para no perderte al momento de escribir tu documento y no pasar por alto ninguna de las menciones legales que debes incluir en el mismo, puedes hacer uso de modelos de precontrato de trabajo ya listos y disponibles en diferentes formatos (Word, PDF, etc.).
• Incumplir un precontrato de trabajo puede conllevar la indemnización por los daños y perjuicios causados.
• Emplear una herramienta especializada resulta siendo la cereza del pastel.