Comprender el uso de la IA en las empresas para impulsar la eficiencia y la innovación

Hoy en día, es imposible que una organización conciba su futuro sin pensar en cómo se beneficiará de la inteligencia artificial. Y esto vale para todos los sectores de actividad. Al mismo tiempo, ante la presión de la competencia, sería una pena no explotar el potencial de esta tecnología, que nos ayuda a trabajar más rápido y con más habilidad.

¿Cómo afecta concretamente la IA a las empresas ? ¿Cómo puede integrarse en los procesos cotidianos y con qué herramientas?

Automatización, generación de textos, reconocimiento facial, personalización... hay un sinfín de casos de uso, que abarcan toda una gama de profesiones diferentes. Pero hay que utilizar bien la inteligencia artificial, siendo conscientes de sus limitaciones y de los problemas que plantea...

... y entender qué entendemos por IA en los negocios. Por eso necesitamos empezar con una definición.

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Definición de inteligencia artificial

¿Qué es la IA y la IA en la empresa?

La inteligencia artificial define un conjunto de tecnologías capaces de reproducir el comportamiento y las capacidades cognitivas humanas (planificación, toma de decisiones, creación, etc.). Tanto en la vida privada como en la profesional, la IA no deja de ganar terreno y cada vez se ve más como la forma obvia de ayudarnos en nuestras tareas y decisiones cotidianas.

En el lado profesional (ya que es lo que nos interesa hoy), los casos de uso de la IA en las empresas son numerosos, y van desde la generación de textos hasta la automatización, pasando por el análisis de imágenes y el Internet de las Cosas.

💡 Existen varios tipos de inteligencia artificial:

• IA débil, especializada en una tarea (asistentes de voz, por ejemplo) ;
• IA fuerte, hipotética, capaz de razonar como un individuo.

Las diferentes tecnologías de inteligencia artificial

Según el punto de vista, existen muchas tecnologías de inteligencia artificial diferentes.

Vamos a centrarnos en tres de ellas que aparecen con bastante frecuencia en los debates, porque entenderlas le ayudará a visualizar el abanico de posibilidades que se derivan de ellas:

• Machine Learning: es el famoso aprendizaje automático. Aquí, las máquinas son capaces de aprender por sí mismas a partir de los datos, sin necesidad de ser programadas previamente para realizar una tarea específica. Cuanto más analizan, más precisas se vuelven.
  
  
• Deep Learning: es una rama del Machine Learning. ¿Qué la hace especial? Procesa información compleja (imágenes, texto, sonido, etc.). Inspirada en el cerebro humano, se basa en redes neuronales artificiales compuestas por grandes volúmenes de datos.
  
  
• IA Generativa: hemos oído hablar mucho de ella en los últimos años, ya que es la tecnología que nos permite, entre otras cosas, producir contenidos (texto, imágenes, vídeo e incluso música). Para lograrlo, explota una gran cantidad de datos, incluidos los modelos lingüísticos (LLM).

¿Cómo puede utilizarse la IA en la empresa? 10 ejemplos

#1 Asistentes virtuales para todos

Cuando se plantea el tema de la inteligencia artificial en la empresa, el primer ejemplo que suele venir a la mente es el de los asistentes virtuales.

En este caso, se trata de IA generativa. Microsoft Copilot, Google Gemini, ChatGPT... estas herramientas, ampliamente utilizadas en las organizaciones, ayudan a los empleados a realizar sus tareas cotidianas.

Podemos imaginar, por ejemplo, un departamento de RRHH que las utilice para redactar sus ofertas de empleo, o un departamento comercial para desarrollar su argumentario de ventas.

#2 Recomendaciones personalizadas

Muy conocida por los departamentos de marketing y ventas, esta faceta de la inteligencia artificial se basa en algoritmos de recomendación para analizar los hábitos de los usuarios, con el fin de sugerirles productos, contenidos o servicios adaptados a ellos. El objetivo: mejorar aún más la experiencia del cliente. 🤩

Esta es, por ejemplo, la estrategia empleada por Netflix, que sugiere películas en función de tus preferencias e historial.

#3 Toma de decisiones inteligente

Ya sea llevado a cabo por los niveles más altos de la empresa, con gran poder de decisión, o por los perfiles más operativos, el necesario análisis de los datos de la compañía llevaría, a la mano, una cantidad de tiempo incalculable.

Gracias a las máquinas, se pueden examinar grandes cantidades de datos históricos en un tiempo récord, para sacar las mejores conclusiones...

... ¡pero también para proyectar el futuro, como demuestra el análisis predictivo de ventas, por ejemplo!

#4 Automatizar las tareas administrativas

Cuando pensamos en los casos de uso de la IA en la empresa, solemos pensar en "automatizar procesos y tareas repetitivas ".

Y esto se aplica a la mayoría de las profesiones: el departamento de contabilidad utiliza la IA para procesar facturas, el departamento de RRHH para clasificar CV, etc.

#5 La robotización al servicio de la industria y la logística

La inteligencia artificial y la robotización forman una poderosa alianza para ahorrar tiempo en las operaciones industriales y logísticas. Gracias a la IA, los robots ya no se limitan a ejecutar movimientos programados: son capaces de adaptarse y tomar decisiones en función de su entorno. 🤖

Algunos ejemplos son las máquinas utilizadas por Tesla para ensamblar piezas de automóviles o por Amazon para clasificar y transportar paquetes en los almacenes.

#6 Reconocimiento facial para la vigilancia

El reconocimiento facial, que consiste en identificar a un individuo a partir de una imagen o vídeo, se basa en la inteligencia artificial y la visión por ordenador.

En efecto, esta tecnología consiste en estudiar los rasgos de un rostro y compararlos después con una base de datos para validar (o no) una coincidencia. Se utiliza mucho en el ámbito de la seguridad, desde la simple validación del acceso a una máquina o a un local hasta la identificación de delincuentes por los organismos de defensa.

💡Nótese que los departamentos de marketing también utilizan el reconocimiento facial, con el objetivo de comprender las emociones de las personas ante un anuncio.

#7 Detección del fraude en tiempo real

Ya es habitual que las entidades financieras utilicen la inteligencia artificial para analizar las transacciones bancarias y detectar comportamientos sospechosos en tiempo real.

Más concretamente, la IA compara cada transacción con los hábitos del cliente (importe, ubicación, tipo de compra, etc.). Si se detecta una anomalía, el sistema bloquea la transacción o envía una alerta.

#8 Ciberseguridad reforzada

Las amenazas a la ciberseguridad evolucionan constantemente y los ataques son cada vez más complejos. La inteligencia artificial es aquí un verdadero activo para las empresas, ya que les permite identificar y responder a los ataques en tiempo real.

Mediante algoritmos de aprendizaje automático y aprendizaje profundo, la IA puede detectar comportamientos sospechosos... ¡incluso antes de que se haya validado completamente un riesgo! 🛡️

#9 Análisis de imágenes para el diagnóstico médico

El campo médico, como todos los demás, ve cada vez más la inteligencia artificial en el corazón de sus procesos.

Esta tecnología destaca, en particular, en el análisis de radiografías, resonancias magnéticas, escáneres y otras imágenes médicas. Mediante algoritmos de visión por ordenador, es capaz de detectar anomalías y enfermedades mucho más rápidamente que el ojo humano.

#10 Mantenimiento predictivo de las máquinas

Por último, hablemos del mantenimiento predictivo, que se utiliza para anticiparse a las averías de los equipos antes de que se produzcan.

En este caso, se utiliza la inteligencia artificial para procesar en tiempo real los datos procedentes de los sensores instalados en las máquinas. De este modo, detecta signos de desgaste o mal funcionamiento, para reducir el tiempo de inactividad.

Inteligencia artificial: ventajas e inconvenientes para las empresas

Ventajas de la inteligencia artificial para las empresas

Aumento de la productividad

La primera ventaja que atrae a las empresas es, por supuesto, la promesa de ahorrar tiempo y aumentar la productividad.

De hecho, hay muchos ejemplos de máquinas que realizan tareas en lugar de humanos: responder correos electrónicos, introducir datos de facturación, clasificar currículos, etcétera.

Como resultado, la IA libera tiempo para los empleados, que pueden así centrar sus esfuerzos en tareas de mayor valor añadido. La empresa es más eficaz y reduce sus costes.

Una estrategia más afinada

La inteligencia artificial ayuda a las empresas en su trabajo de predicción y análisis, gracias al procesamiento masivo de datos (Big Data).

De este modo, las organizaciones pueden afinar su estrategia e incluso ir un paso por delante de sus competidores al ser capaces de reaccionar rápidamente ante las futuras tendencias de consumo y los cambios en el comportamiento de los consumidores.

Mejorar la experiencia del cliente

En el ámbito del marketing y la gestión de las relaciones con los clientes, la inteligencia artificial está ayudando a superar un reto importante: ¿cómo avanzar hacia una personalización cada vez mayor en un momento en que las interacciones tienen lugar cada vez menos en persona?

Como era de esperar, la IA se perfila una vez más como la solución. Y con razón, puede personalizar la experiencia del cliente en función de sus preferencias y su comportamiento de compra.

💡 ¡No olvidemos que, al mismo tiempo, aumentar la satisfacción del consumidor también significa ahorrar el tiempo antes mencionado! Trabajar más rápido significa satisfacer irremediablemente sus demandas de rapidez y capacidad de respuesta.

Mayor agilidad e innovación

La inteligencia artificial mejora la agilidad de las empresas, haciéndolas más preparadas para adaptarse rápidamente a los cambios del mercado. Las organizaciones pueden ahora ajustar sus estrategias en tiempo real, sin demora (optimización de precios, producción, acciones de marketing, etc.), y reaccionar rápidamente a los cambios de su entorno.

En definitiva, la IA estimula la innovación ofreciendo la flexibilidad necesaria para la competitividad. 💪

Límites y problemas de la IA en la empresa

Por supuesto, un cambio tan radical en nuestras vidas profesionales y privadas no deja de suscitar ciertas preguntas y avivar algunos temores.

En primer lugar, toda empresa debe tener en cuenta las cuestiones éticas que implica el uso de los datos personales de los consumidores. Por ejemplo, cuando recopilan datos para sus sistemas, deben asegurarse de que cumplen los requisitos del RGPD.

Pero la ética también significa no quedar atrapado en un círculo vicioso, en el que un sistema que se autoperpetúa corre el riesgo de reforzar una única forma de pensar y discriminar que ya está (¡lamentablemente!) arraigada. Tomemos el caso de los reclutadores: deben encontrar el justo equilibrio entre la intervención humana y la automatización, pues de lo contrario corren el riesgo de pasar por alto ciertos perfiles "atípicos" que no se ajustan a los estándares estadísticos.

Por último, está sin duda la cuestión de la transformación empresarial. Reconozcámoslo, la IA da miedo. Sin embargo, más que la desaparición de determinados puestos de trabajo, lo que está en juego es su transformación. En consecuencia, las organizaciones deben tomarse en serio esta cuestión, apoyando a sus empleados en la medida de lo posible con formación y un sólido enfoque de gestión del cambio.

Implantación de la IA en las empresas: un ejemplo

Ante los retos que plantea la IA, implantarla en las empresas no es tarea fácil. Hay que ser capaz de desplegar sistemas que sean a la vez robustos (para soportar grandes cantidades de datos) y seguros.

👉 He aquí un ejemplo de proceso para una integración fluida y exitosa.

• Define tus objetivos. La inteligencia artificial adopta muchas caras. Y dado lo engorroso que resulta implantarla, es difícil inculcarla de manera uniforme en todos los estamentos de tu organización. Por tanto, defina sus prioridades, los objetivos que desea alcanzar gracias a la inteligencia artificial. ¿Más productividad? ¿Más personalización? ¿Mejor toma de decisiones?
  
  
• Seleccione las tecnologías adecuadas. Las soluciones de IA varían en función del caso de uso. Puedes optar por Machine Learning, Deep Learning o incluso NLP para tareas relacionadas con datos textuales.
  💡Si prefieres llave en mano, recurre a una solución global de gestión empresarial que aproveche el potencial de la IA por ti. Es el caso de SAP S/4HANA, un innovador ERP desarrollado para optimizar numerosos procesos gracias, entre otras cosas, a la inteligencia artificial. Además de automatizar multitud de tareas, proporciona potentes análisis en tiempo real, incluso de grandes cantidades de datos, para una mejor toma de decisiones.
  
  
• Confíe en las personas adecuadas. Poner en marcha una estrategia de IA impactante requiere una amplia gama de habilidades. Es esencial contar con un equipo interdisciplinar: expertos en datos, científicos especializados en inteligencia artificial y gestores de proyectos deben trabajar codo con codo. Sin olvidar el compromiso de la dirección, esencial para que la tecnología se adopte en la organización.
  
  
• Recopilar y preparar los datos. La IA se basa en datos de calidad. Identifique las fuentes de datos internas y externas y asegúrese de que están limpias, completas y bien estructuradas.
  
  
• Integrar la inteligencia artificial en los procesos empresariales. Una vez validados los modelos de IA, es hora de integrarlos en los procesos existentes, a través de plataformas de software (en la nube o no) o aplicaciones internas. ¿El objetivo? Hacer que la IA sea accesible a todos los usuarios, sin perturbar la actividad cotidiana.
  
  
• Probar e iterar. El proceso de despliegue de la IA nunca se detiene. Pruebe periódicamente el rendimiento de la IA y ajuste los modelos en función de los resultados. Establece también un procedimiento de vigilancia tecnológica para mantener la pertinencia de tus modelos a lo largo del tiempo.

💡 Como recordatorio, es importante conseguir que los empleados se impliquen cuando se enfrentan a un cambio tan radical. Por ello, te aconsejamos que pongas en marcha sesiones de formación, que ayudarán a los equipos a comprender la IA y su impacto en su trabajo. De hecho, le invitamos a visitar la página economie.gouv.fr para descubrir ejemplos de formación de calidad (teórica, práctica, más centrada en ChatGPT, por ejemplo, etc.).

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¿Qué futuro le espera a la IA en las empresas?

La inteligencia artificial está transformando profundamente las empresas. Para seguir siendo competitivas e innovadoras, ahora comprenden lo importante que es hacer frente a estas nuevas tecnologías.

Sin embargo, a medida que la IA evoluciona, surgen nuevos retos, sobre todo en lo que respecta a la seguridad de los datos, la ética y el impacto en los puestos de trabajo. Por ello, el futuro de la inteligencia artificial debe basarse más que nunca en la colaboración hombre-máquina.

Esta sinergia abrirá nuevas oportunidades, permitiendo a los empleados aprovechar las capacidades analíticas de la inteligencia artificial, preservando al mismo tiempo su creatividad y su pensamiento crítico. Las empresas que dominen esta interacción tendrán una ventaja decisiva en la economía digital del mañana. ¿Está usted preparado?